2008: XXX ANIVERSARIO DE LA MUERTE DE GASPAR

Estreno del Documental y publicación del libro:

 

GASPAR

Misionero y comandante sandinista

 

El libro GASPAR, misionero y comandante sandinista fue publicado por la RTPA en el año 2008, coincidiendo con el XXX Aniversario de la caída en combate de Gaspar García Laviana, 11 de diciembre de 1978. Ello sucedió en Nicaragua, a donde Gaspar llegó como Misionero del Sagrado Corazón y, ejerciendo esa labor, habiendo experimentado la injusticia y opresión  a la que estaban sometidos sus parroquianos y viendo que en aquella situación de dictadura no cabía otro camino de liberación que la lucha armada contra el régimen somocista, él mismo también tomó la decisión de incorporarse a la guerrilla dirigida por el Frente Sandinista de Liberación Nacional. De ahí el título.

El libro tiene su origen en el documental que se presenta con el mismo título. El artífice de ambos fue José Ramón Pérez Ornia, en ese momento Director General de Radiotelevisión del Principado de Asturias (2005-2011), que puso especial empeño en esta obra debido ello a varias circunstancias entre las cuales cabe destacar que este gran profesional de la información había vivido en Tuilla y había conocido y tratado muy de cerca a Gaspar y a su familia. Puedo dar fe cómo siguió muy de cerca, con esmerado empeño y cariño la tarea de publicar estos dos trabajos.

Llama la atención cómo José Ramón Pérez Ornia describe la personalidad de Gaspar, a mi entender, muy certeramente, ayudando a los lectores a llegar al corazón mismo de protagonista tan excepcional: “Gaspar y Pedro Regalado, al igual que otros muchos curas obreros y misioneros, proyectan y encarnan siempre sus creencias y vivencias religiosas en la realidad social que les toca vivir. Es decir, piensan y viven la fe cristiana a partir de un compromiso con el hombre, sobre todo con los más necesitados”.

Es verdad, Gaspar no es un quijote iluminado movido por ideas estrambóticas. Su mística es compartida por otros curas tanto en América como aquí en Europa. La Teología de la Liberación es el alma misma de todos cuantos son sensibles al sufrimiento de los oprimidos por ominosas injusticias. Gaspar está dentro de este contexto y por eso bien lo define José Ramón diciendo de él que “se comprometió con los más pobres y dio su vida para liberarles de la opresión”.

La concepción tanto del documental como del libro a base de entrevistas a una gran variedad de personas que conocieron a Gaspar les da una gran vivacidad, y al mismo tiempo nos dan entre todos la oportunidad de llegar a conocer profundamente quién fue Gaspar García Laviana pues podemos llegar a él desde distintos ángulos. Se entrevista a gente de Nicaragua y de España, a clérigos y laicos, a combatientes sandinistas, a gentes de Rivas y Tola, a quienes le conocieron en Madrid y en Langreo, etc. Una enriquecedora diversidad que incluso desde distintas mentalidades nos dan sus apreciaciones de lo que vieron en Gaspar.

A este respecto, entre todo lo que se puede oír en el documental o leer en el libro, quisiera destacar de modo resumido lo que de Gaspar dice la gente de Rivas y Tola: “miraba por el pobre”, “compartió todo con nosotros”, “nos dio a entender que quería un cambio de política, pero no con guerra”, “todos le apreciábamos y teníamos confianza con él, como si fuera uno de nuestros hijos”, “él se implicaba como si fuéramos su familia”, “nos enseñó a amarnos entre nosotros”, “era una persona accesible”, “le dolía en el alma la pobreza de los campesinos, el abandono de los niños, las mujeres con grandes cargas en los hombros”, fue “el perfecto profeta del siglo XX”.

En aquel año 2008 iba ya decayendo el recuerdo de aquel cura asturiano que había muerto luchando por defender los derechos humanos de la gente de sus parroquias. El impacto que su muerte había causado y el eco que produce en la prensa poco a poco se debilitan. Se olvida la comitiva asturiana que fue a Nicaragua a su entierro definitivo en Tola y son pocos los que conocen al personaje que da nombre a una calle de Gijón, Oviedo, Lugones y Tuilla, que le honraron con ese gesto. La Cantoría Gaspar García Laviana, que avivaba su recuerdo siempre que actuaba, ya no existe, debido a que algunos de sus miembros, como el mismo director, Julio, han muerto y otros se han hecho mayores.

Debido a la publicación del libro de RTPA y a la emisión del documental GASPAR, misionero y comandante sandinista se vivió un momento de especial intensidad aquí en Asturias la memoria del cura de Tuilla muerto en Nicaragua en combate contra la dictadura del general Somoza. Era normal, sobre todo por el impacto que siempre tiene la televisión, donde además se organizó un coloquio de presentación. Hay que añadir también el estreno del documental que se hace el 11 de diciembre de 2008 en el Entrego (SMRA), parroquia donde había nacido Gaspar, pues a ella pertenecía entonces les Roces. En una grabación Gaspar dice que nació en La Oscura, barrio donde vivía su abuela en El Entrego. En este momento se contó con la presencia de Pedro Regalado, amigo inseparable de Gaspar tanto durante sus estudios como en Nicaragua. También se presentó el documental en Madrid, en la Delegación del Principado de Asturias en la capital, el 5 de febrero de 2009, participando en dicho acto: Manuel Campo Vidal, Presidente de la Academia de las Ciencias y las Artes de Televisión, el mismo director General de RTPA, José Ramón Pérez Ornia, Karmentxu Marín, periodista de El País y el Padre Andrés, misionero de la parroquia de San Federico y MSC.

El documental y el libro fueron decisivos para reavivar entre nosotros la memoria de nuestro Gaspar. En este año 2008 nace una reunión de curas, a los que luego se unirían seglares. Se reunen en la parroquia de Jove y lo hacen con el fin de fomentar y difundir opiniones distintas al pensamiento monolítico oficial de nuestra Iglesia, asturiana y en general, ambas igualmente conservadoras. Cuando se formaliza una Asociación civil con sus estatutos se decide darle a este Foro el nombre “Gaspar García Laviana”. Dos miembros del Foro habíamos intervenido en el documental con lo que nuestro ánimo ya estaba caldeado con la celebración del treinta aniversario de Gaspar, aunque la verdad es que Alfredo Cueto, sacerdote también natural de Tuilla, misacantano con Gaspar en el mismo año, no necesitaba de ningún estímulo especial, pues fue la persona que en Asturias recogió todo lo que se escribía o se hacía en torno a su amigo, no cejando en la preocupación de mantener vivo el recuerdo de su amigo difunto. Todo ese material está escaneado y puesto en la web del Foro Gaspar García Laviana (www.forogasparglaviana.es).

Merece la pena traer a estas líneas el primer párrafo  de los Estatutos del Foro por la referencia que hacen a nuestro personaje: “Con nuestra denominación “FORO GASPAR GARCÍA LAVIANA” queremos contribuir a mantener vivo el recuerdo del sacerdote asturiano Misionero del Sagrado Corazón que entregó su vida en Nicaragua en defensa de los valores evangélicos de la justicia y de la paz el 11 de diciembre DE 1978 y expresarle nuestra gratitud por su testimonio de fe cristiana, encarnada en aquella sociedad donde tanto se conculcaban los derechos humanos en las personas más débiles, como el mismo Gaspar nos cuenta en sus escritos”.

También hay que resaltar el tratamiento excepcional que se le da a Gaspar en la Web de este foro. Bajo el epígrafe del botón SOBRE GASPAR se accede a estos cinco apartados: Galería de Fotos, En memoria de Gaspar, Testimonios sobre Gaspar, Escritos sobre Gaspar y Escritos de Gaspar. Se ofrece un abundante material sobre la vida de Gaspar. Esperamos contribuir a mantener vivo el recuerdo de su ejemplar vida, de los valores que motivaron sus arriesgadas decisiones al servicio de los más humildes, de los empobrecidos y maltratados nicaragüenses por los poderosos de ese país.

 

Visión que dan de Gaspar los 14 asturianos que fueron entrevistados para hacer el documental.

En el libro aparecen, por diversos motivos, catorce asturianos que son los entrevistados para el documental. Trataré de sintetizar la visión de conjunto que dan de Gaspar, dejando por estar ya recogido anteriormente lo que José Ramón Pérez Ornia destaca de él en el prólogo del libro.

Era un hombre creativo, inteligente, muy pasional, muy vital, muy comunicativo, muy libre, muy soñador. Era un idealista. Muy expresivo, muy expansivo, muy jovial. Atraía a la gente. Donde él estaba había juerga, animación, buen humor. Transmitía alegría. Tenía un temperamento fuerte, pero era pacífico. Corazón inmenso donde cabía todo el mundo, con una ternura enorme ante del dolor de alguien. Daba la cara. Un gran luchador. De convicciones serias, fuertes y decididas. Convencido, valiente, honrado. Tenía una personalidad arrolladora. Una gran persona, un fuera de serie.

Gaspar era una persona muy sensible. Lo fue sobre todo a la realidad de Nicaragua, a las injusticias sociales. Supo ver las necesidades de la gente, la lucha que había, la falta de libertad. Destaca también en él la coherencia en su compromiso con la gente obrera en Madrid y luego en Nicaragua con los más pobres, con los desfavorecidos. Siempre obró en consecuencia  con lo que creía, con lo que le parecía que debía hacer.

Habiendo tomado la opción por los más pobres, lo ven como radicalmente comprometido en la defensa de los necesitados, de los que sufría injusticia. Fue todo solidaridad, generosidad y entrega. Se encarnó, se identificó con el pueblo nicaragüense, maltratado, sufriente y desde él y con él hizo lo único que vio posible para su liberación.

Al hablar de Gaspar algunos tocan el tema de la violencia, el haberse comprometido en la lucha armada: Quiso cambiar como fuera la situación de la gente. Negado el camino del diálogo, de la justicia, de la política, optó por el único camino posible para contribuir a la liberación de la gente que vivía en la miseria. Si optó por la guerrilla fue porque era la única opción posible y  si lo hizo fue porque consideró que era bueno. No tuvo otra opción más que coger las armas. Obró en conciencia, que es la norma de moralidad. Fue coherente y punto.

Fuimos testigos allí del cariño y devoción que en Nicaragua se le tenía al cura asturiano. Gaspar fue un santo, porque sobresalió fundamentalmente en el amor: nadie tiene mayor amor que dar la vida por los demás. Es un mártir en Nicaragua. Lo veo como a un mártir. Un profeta y un poeta. Modelo inagotable, testimonio para todos.

Podemos terminar este relato interior de la personalidad de Gaspar con estas palabras que José Ramón Pérez Ornia le dedica en el prólogo del libro: “un asturiano universal, porque son universales los valores que encarna, entre ellos la lucha contra la injusticia hasta el punto de dar su vida por los demás, en su caso por los más oprimidos, los más pobres. Universal también porque sus ideas y valores trascienden el tiempo y los lugares en que vivió”.

José María Álvarez Rodríguez.

Miembro del Foro Gaspar García Laviana